Este cuadro es un ejemplo de sentimiento de Fragonard para el color, el manejo sensible de los efectos de la luz, y su facilidad técnica extraordinaria.El elegante vestido azul, cofia de encaje, y el peinado de la mujer sentada en su mesa de escribir musthave sido el grito de la moda a la vez se hizo esta pintura. La inscripción en la carta que tiene ha dado lugar a diferentes interpretaciones se podrán hacer referencia a su caballero, pero si se lee Cuvillere, entonces el modelo sería la hija de François Boucher, profesor de Fragonard. Marie Émilie Boucher, nacido en 1740, quedó viuda en 1769 y se casó, en 1773, amigo de su padre, el arquitecto Charles Étienne Gabriel Cuvillier.
1770 Óleo sobre lienzo, 83,2 x 67 cm Metropolitan Museum of Art, Nueva York
